Con trajes de neón, frases irreverentes y una sonrisa desafiante, Baddie Winkle se convirtió en un ícono viral del internet… a los 85 años. Hoy, con más de 3 millones de seguidores, esta mujer estadounidense demuestra que la edad no limita la libertad, la creatividad ni el derecho a habitar el cuerpo con orgullo.

Baddie —cuyo verdadero nombre es Helen Ruth Elam— comenzó su camino en redes sociales como un acto de autocuidado y sanación tras la pérdida de su esposo e hijo. Lo que inició como un juego se transformó en un movimiento: una abuela que desafía estereotipos de género, edad y belleza, que se viste para sí misma y que se ríe de los juicios.

Desde la ropa hasta su discurso, Baddie representa a una generación de mujeres mayores que exigen ser vistas no solo como abuelas o cuidadoras, sino como seres plenos, sexuales, creativos y con voz propia.

En SororIA creemos que el feminismo también se construye desde la vejez, que el deseo y la rebeldía no tienen fecha de caducidad, y que el derecho a una vida libre, digna y divertida es para todas, sin importar la edad.

¡Gracias, Baddie, por recordarnos que envejecer también puede ser un acto radical!

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