En noviembre de 2024, la Fundación Tailandesa para la Promoción de la Salud se asoció con la Fundación Progresista de Mujeres y Hombres en una campaña contra la violencia doméstica con un giro atrevido. La campaña se centra en la difunta Gigi Supitcha, una figura pública tailandesa que perdió trágicamente la vida en 2023. Supitcha había sobrevivido anteriormente a un enfrentamiento casi mortal con su pareja, sólo para enfrentarse a otro incidente de violencia por parte del mismo individuo, que la llevó a la muerte. La activación comenzó reviviendo la inactiva cuenta de Instagram de Supitcha con un cartel de una película ficticia titulada Segunda Oportunidad. Cuatro días después, se publicó un vídeo teaser en la misma cuenta, en el que aparecía una Supitcha generada por IA lanzando un mensaje conmovedor: nunca volvería a protagonizar otra película por haber dado una segunda oportunidad a su agresor. La publicación se hizo viral, consiguiendo más de 100.000 interacciones en 24 horas y suscitando conversaciones críticas sobre los retos de enfrentarse a los malos tratos.

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